Mi sensibilidad me delata. Si mis lágrimas se escapan y caen
por mi rostro delante de alguien me siento vulnerable. Si te doy un abrazo, hay
más personas y me rechazas, me siento muy pequeña. Si te beso y esquivas mi
beso, siento que no debo demostrar mis sentimientos.
Pero la sensibilidad hacia otro ser humano, hacia otro
animal, hacia la música, hacía la belleza de una pintura o de una escultura, no
es una muestra de debilidad, es una muestra de la inteligencia de cada uno de
nosotros, por ese motivo no debemos avergonzarnos nunca de lo que somos y de
demostrar nuestros sentimientos.
La sensibilidad y la inteligencia
La sensibilidad hacia la belleza, hacia las personas, hacia
los lugares, hacia lo que nos rodea suele ser una característica de las
personas inteligentes. La sensibilidad es una de las manifestaciones de la
inteligencia, de nuestra forma de ver y de disfrutar del mundo, por ese motivo
es necesario dejar que invada los poros de nuestra piel, dejar que una sonrisa
invada nuestro rostro o que una lágrima resbale por él, en definitiva, sentir.
-Albert Einstein: “El verdadero signo de inteligencia no es
el conocimiento, sino la imaginación.”
Personas con alta sensibilidad
Hay personas que reaccionan con mucha sensibilidad a su
entorno. Son capaces de entender todo lo que ocurre, observan con mucho
detenimiento y a veces, hacen suyos los sentimientos y las emociones de otras
personas. Las personas altamente sensibles, tienen algunas características que
las definen como las siguientes:
***Sensibilidad ante la crítica
Una crítica a una persona con alta sensibilidad puede
hacerle daño, porque se trata de personas a las que les afecta mucho la opinión
negativa de los demás y se pueden sentir mal. Pero eso no debe impedir que se
les critique de forma constructiva, con comentarios u opiniones inteligentes.
***Sensibilidad ante los ambientes y lugares
Una persona que se caracteriza por su sensibilidad advierte
cualquier pequeño detalle en cada ambiente, un olor, un color, un sonido. Los
sonidos muy altos, los lugares con mucha gente, les suelen molestar o causar
incomodidad.
***Por otra parte, tiene una particular delicadeza y su
capacidad de observación le hace apreciar especialmente la belleza de un lugar,
la tranquilidad, los sonidos suaves.
***Disfrutan de momentos de soledad
Las personas con un nivel alto de sensibilidad necesitan
momentos para disfrutar de sí mismas en soledad, para reflexionar sobre su
existencia, para hacerse preguntas y ver las pequeñas cosas de su vida a solas.
***Se implican cuando algo les apasiona
Si una persona con una gran sensibilidad se apasiona por
algo, su grado de implicación es muy fuerte y suelen transmitir ese entusiasmo
a otras personas de su entorno, porque la pasión es contagiosa. De esa forma
transmiten sensaciones muy positivas a los demás y disfrutan de cada segundo de
la vida.
***Se entregan a los demás
Una persona altamente sensible, suele ser empática, se
identifica con otras personas y aprende a ponerse en su lugar. Suelen ser
personas que ayudan a los demás y se preocupan por lo que le sucede a la gente
de su entorno.
***Tienen una gran imaginación
Una persona sensible suele quedarse abstraída mirando un
paisaje, una obra de arte, la belleza de una persona… Tienden a tener una gran
imaginación y a dejarse llevar por sus pensamientos, por ese motivo, necesitan a
veces la soledad para poder sentir con plenitud todos sus sueños y sus ideas.
Arantxa Alvaro Fariñas, colaboradora en "La Mente es Maravillosa"